BCCCAP00000000000000000000226
54 MISIONES CAPUCHINAS EN ÁFRICA la línea; confina con el de Popó por la parte de arriba, y por la de abajo con el de Benín, los cuales no son reinos muy dilatados y están antes de cortar la línea. En el discurso del viaje experimentaron estos Padres varios trabajos y el mayor de todos fué el que les ocasionó la influencia de los climas, con lo cual enfermaron casi todos y murieron muchos. Entre ellos murió Antonio, el criado del embajador, con la prevención de los santos sacramentos y con– suelo de todos por lo bien que se dispuso (57). 8.-En llegando a la corte de Arda, fueron a ver al rey y a darle la res– puesta que llevaban de nuestro Rey Católico; recibiólos con agasajo y les mandó dar alojamiento. Por primera diligencia se le anunció no podía salvarse sin el santo bautismo y sin recibir la fe santa de Cristo Señor nuestro, para lo ctial era necesario dejar los ritos de su falsa secta, los hechizos y supersticiones y sujetarse al santo matrimonio, no teniendo cada hombre sino una sola mujer, y cada mujer un solo varón en matrimonio santo. Todos estos puntos le pare– cieron duros y por no mostrar su renitencia de ánimo, dijo comunicaría aquel negocio con sus consejeros privados. Detúvose en responder y por fin de la consulta les dijo a los, religiosos que él estimaba mucho el favor que le había hecho su buen hermano el rey de España, pero que la embajada que le envió con Bans, portero de su palacio, no fué para mudar de creencia y admitir otra ley que aquella en que vivía y habían vivido sus mayores, sino para que se sirviese de enviarle· algunos budonos o sacerdotes cristianos que les conju– rasen los nublados, por ser muchos los estragos que hacen en aquella tierra, cayendo innumerables rayos y centellas con que perece la gente y los ganados · y se les abrasan las casas y los campos. Que si gustaban de ejercitar la gracia que tenían para eso y vivir en su corte, se lo estimaría y pagaría bien y les concedería cuanto le pidiesen para su regalo y servicio. 9.-Con esta respuesta quedaron los religiosos desahuciados de lograr fruto alguno; mas con todo eso no desistieron de hacer cuantas diligencias pudieron por todos los caminos y medios que alcanzaron. Perseveraron un año y en el discurso de este tiempo murió el capitán del navío, que era vecino de Sevilla y hombre muy honrado y devoto. Bans se volvió al vómito de sus amanceba– mientos y hechicerías, y los religiosos, queriendo oponerse a las públicas ido– latrías que hacían, fueron maltratados varias veces. En una especialmente se (57) Según la relación del Vicepresidente (Zima, Arda, 26 de mayo de 1660) al poco tiempo de llegar enfermaron todos y murieron cuatro sacerdotes, volviendo otros en el mismo barco que les llevó; quedó asimismo otro Padre gravemente enfermo, el cual falleció muy pronto (APF, SA, v. 255, f. 77). La otra relación, debida a los PP. Carlos de Los Hinojosos y Atanasio de Salaman– ca, dice que murieron cinco Padres de los enviados muy pronto de su llegada (Cfr. di– cha relación en mi artículo citado Misión Capuchina al reino de Arda, donde se copia · parte de ella; puede verse también en los apéndices).
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz