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2 2 ★ * * * [CARTA DEL PROCURADOR GENERAL AL MINISTRO PROVINCIAL SOBRE LAS MISIONES DE COLOMBIA (10 mayo 1891)] [APCV 0 3 0 / 3 / h ] Roma, 10 mayo 1891 . M. R. y carísimo P. Provincial: Mucha pena nos ha causado el fallecimiento del M. R. P. Custodio Fr. José de Valdeviejas. El Gobierno de aquel Estado Nos ha escrito también tan triste noticia, como lo ha hecho igualmente el Sr. Obispo, añadiendo to­ dos merecidos elogios de tan llorado Misionero. Dios N. S. ha querido recompensar las fatigas evangélicas de su siervo, y no dudamos que su noble ejemplo suscite nuevo fervor apostólico en toda la Provincia, pues si el sacrificio es grande también son muy grandes sus frutos, pues ya saben que los bautismos de aquella Misión exceden a to­ dos los de las Misiones de Capuchinos de España y tal vez no hay Misión alguna en la Orden que los haya tenido en nuestros días iguales. Los PP. que han quedado son demasiado jóvenes para poder hacer Custodio a alguno de ellos. Es necesario, pues, que poco a poco V. R. vaya pensando en enviar al­ gún Padre que sea o haya sido Definidor o Custodio para que tenga el prestigio de la edad y oficios pasados. Y si no pudiesen darles antes del próximo Capítulo un Jefe o Custodio fijo, deberían enviar provisoriamente a otro Padre escogido entre los que tengan o hayan tenido Prelatura o Definitoriato en la Provincia. Este grandísimo sacri­ fico lo reclama Dios mismo, autor de la vida de sus siervos y lo exigen las imprescin­ dibles necesidades de la Misión, compuesta sólo de jóvenes. Pero, repetimos, que no hay prisa, bastando sea enviado a fin de verano, y si V. R., para consolar y consolidar la Misión, quiere hacer la Visita canónica de ella, podría acompañar al nuevo Custodio y presentarlo a ambas autoridades e instalarlo, como a ello tiene V. R. derecho, como dicen las Ordenaciones y disposiciones para España. Si para ello envían a algún Guardián actual, pueden suplirlo con un Presidente o proponemos otras combinaciones dentro de la Provincia, pues Nos les daremos todas las licencias y dispensas necesarias. Y como el sacrificio es efecto de fuerza mayor e imprevisto, estén ciertos que Dios sabrá arreglar vuestras cosas para vuestro bien y prosperidad común. En estas circunstancias todos, Superiores y súbditos, deben a V. R. y a Nos plena obediencia para ir a Colombia si son designados para Custodios. Fr. Lorenzo de Masamagrell Nos pide para ser Trapense, y que dos PP. se lo aprueban y V. R. no lo desaprueba ni aprueba. Hágale V. R. las reflexiones oportunas, pues sabemos por experiencia que tales vocaciones suelen salir mal, pues siendo tra- penses hacen de capuchinos, y cuando eran capuchinos querían hacer de trapenses y así andan inquietos en ambas religiones. Los confesores no deben ser tan fáciles en aprobar tales ideas. Por lo demás, si dicho Hno. persiste, es necesario envíe antes un documento oficial de admisión del Abad Trapense y que V. R. nos dé su parecer. Ya respondimos al M. R. P. Guardián de Masamagrell sobre la traducción e im­ presión de las obras del P. d'Argentan, diciéndole podía hacerlo con sujeción entera a V. R. Pedimos al Señor arregle lo de la compra del convento de Antequera. Lo bendecimos d e corazón a V. R. y a tod a la Provincia. Affmo. p. y s. en Xto.