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2 0 pero ningún Superior es responsable si algún periódico de otro territorio copia tal pe­ tición del periódico de su territorio; con todo, en cuanto posible, evítese recurrir a pe­ riódicos para estos y otros asuntos, declaramos hasta nueva orden que si algún Provincial tiene amigos particulares en otra Provincia, puede recurrir a ellos por carta en algún caso raro y extraordinario, para implorar su caridad, con tal que en el mismo semestre no recurra a más de dos bienhechores en la ciudad o pueb lo donde tiene convento la otra Provincia, de diez en toda la Provincia civil o Provincias civiles limí­ trofes donde existe tal convento, y de veinte en las demás diócesis donde no hay con­ vento . X. Como los Provinciales necesitan de algunos recursos para cumplir con su ofi­ cio, los Guardianes tienen que cuidar de los gastos de los PP. Provinciales y su Secretario en tiempo de la S. Visita, aunque éste no lo pida; y siempre que él lo juzgue oportuno visitando los conventos o en otras ocasiones, según el estado económ ico de su respectivo convento , deben los Prelados poner a su disposición lo sobrante para que pueda socorrer a los conventos pobres y proveer a las necesidades de la Provincia. XI. Para que los Provinciales conozcan en todo tiempo el estado de los Colegios, cada primer día de mes el lector señalará las notas de a p lic a c ió n , y el con el P. Guardián las de r e lig io s id a d o conducta de cada Colegial. El máximum de cada nota se señalará con núm eros, cuyo va lor será: 4 muy b ien , 3 bien, 2 m ed iano , 1 mal. Firmarán esta lista de notas los PP. Guardián y Lector, añadiendo advertencias parti­ culares si las creen convenientes, y las enviarán el m ismo día al P. Provincial, hasta nueva orden, harán también y firmarán una copia para enviarla a Nos. De este modo los Prelados podrán más eficazmente dirigir ios esfuerzos de los Maestros y discípulos en la difícil tarea de la educación religiosa y científica. De todo esto podéis deducir, amadísimos Padres y Hermanos, que Nuestro pa­ terno afecto, al cual gracias al Señor habéis correspondido hasta hoy, Nos lleva cons­ tantemente a ayudar a los Prelados y Súbditos en todo lo que puede contribuir al bien de vuestras Provincias, para que crezcan más y más en virtud, regularidad y religiosi­ dad , principalmente en estos primeros años de su existencia. Nuestras declaraciones son unos medios de obrar mejor y de fortificar vuestros propósitos, y en manera al­ guna expresión de disgusto; un Padre guía e instruye a sus hijos con tanto más amor, cuanto mayor es su buena voluntad; y de este modo os consideramos y queremos a vo­ sotros los Prelados y Súbditos de Nuestras Provincias de España. La presente circular será leída en todos los conventos y residencias. Os bendecimos de todo corazón. Dado en nuestra residencia generalicia de San Nicolás de Tolentino en Roma, a los 6 de Enero de 1 891 , en la fiesta de la Epifanía. Fr. Bernardo de Andermatt Min. Glis. Cap. (Arch. Gen. - G. 62 ) * * * *