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provincia, con características muy peculiares en el Apostolado, en la vida de fraternidad y en el personal que ahí trabaja. Primero luchó por que fuera Josué. Al fin, no se entendieron y tuvimos que separarlos, añadiendo al territorio de San Miguel el de Pedro Vicente Maldonado. Ahí lucha para que venga Miguel (Higinio Gamboa) y su plan es dejarle a Miguel en el centro, para ir a misionar él (Bemabé) otros extremos de la parroquia. Ahora pide, mejor, exige que venga Gabriel (de Azqueta)" (112). Me consta, por testimonio directo, que Ramón Echegaray insistió, desde su puesto de viceprovincial, para que liquidase P. B. sus compromisos personales, porque previó el mismo riesgo, que al fin ha habido que afrontar, vaticinado por su predecesor. El día 20 de febrero de 1979 la asamblea anual de la viceprovincia elige su nuevo equipo gubernativo: viceprovincial, Benito Andueza ; consejeros Ramón Echegaray, Luis Fuertes, Santiago Ramírez, Rodolfo Erburu. Y todos cinco parecen plegarse a los planes de P.B., con la incardinación en su fraternidad, de los padres Higinio Gamboa y Josué Izaguirre; y días más tarde, Gabriel de Azqueta, que se considera especialmente comprometido como animador de su miniemisora (113) . Josué continúa desarrollando su actividad en Pedro Vicente Maldonado, a muchos kilómetros a carretera adelanta hacia Macallares. Por lo cual no parece haberse asociado a la petición que , emperrados en sus tendencias personales, dirigieron P. B., Gamboa y Díaz de Cerio (Gabriel de Azqueta) al Rvmo. P. General. En la respuesta de Roma se les advierte: "Los compromisos apostólicos en esa región deben ser asumidos pastoral y jurídicamente por la viceprovincia. Ningún hermano podrá asumir otros compromisos sin el deseo expreso de la viceprovincia. Los compromisos adquiridos se dejarán cuando la vice– provincia por medio de sus consejeros o de sus capítulos lo decida; nunca por iniciativa personal de los religiosos, aun cuando tuviesen el apoyo de los obispos o del cardenal". "La integración plena con los hermanos de la fraternidad quiere también decir que los hermanos que actualmente trabajan en San Miguel de los Bancos deben estar dispuestos a ir a otras fraternidades, así como los demás religiosos deben estar dispuestos a ir a San Miguel de los Bancos, si los superiores lo juzgan conveniente, sin necesidad de buscar hermanos en otras partes, para que vivan en un lugar deter– minado" (114). Ello es que triunfaron en la demanda, salvo respecto de esa enigmática petición de "otros hermanos, que vivan en lugar deter– minado". Puede ser responsable la fraternidad de Los Bancos; puede ser 516
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