BCCCAP000000000000000000000207

La residencia de la fraternidad capuchina formaba en sus orígenes parte del sector marginado, en tanto que la capilla "Cristo Redentor" surge en zona que generosamente pudiera denominarse residencial (52). Los primeros años de vida, cabe el estero Salado, parece se emplea– ron más ahincadamente en la actividad docente que en la estrictamente parroquial, quizá por ser parroquia de nueva creación, cobijada entre los muros de un colegio privado y en una barriada de pocos hábitos religiosos y menos sotanas. Mas no debieron de tardar los miembros de la fraternidad "Sagrada Familia" en el despliegue generoso y hasta heroico de su celo, hasta alcanzar las cotas de apostolado y obras sociales que el custodio Langarica reseñaban en sus "Relaciones" de los años 68 y 69 : denodada acción ministerial en tres iglesias (parroquia, colegio, capilla filial); cinco grupos bíblicos atendidos una vez por semana ; grupo juvenil mixto "Proyección y Mástil", que dispara sus inquietudes religiosas y morales en su boletín Presencia (capilla Cristo Redentor) ; formación religiosa de millar y medio de alumnos en los colegios "Guillermo Rohde", "Delfina Armeroz de Gómez", "Isabel Luque" y en el club socio recreativo de niños del suburbio; 51 clases semanales en los colegios y 9 en la Universidad Católica (Jesús Arrondo, un par de años); responsabilidad funcional y administrativa de las escuelas de corte y confección y de economía doméstica, traspasadas luego a las religiosas dominicas; de la de alfabetización, gratuita, lo mismo que la asistencia médica a unos 800 pacientes semanalmente por cinco doctores (perfeccionado desde 1970); economato parroquial, que facilita víveres a precio de fábrica, a 80 familias, semanalmente (53). Nace en 1971 la Fraternidad de trabajo, no tanto por un ansia de reavivar las precedentes promociones, como por "buscar nuestra propia identidad personal, sacerdotal y religiosa. . . Vida de inserción en la comunidad social, a través del trabajo en la mañana, y a través del apostolado en horas de la tarde y noche" (54). Reiteradamente he venido indicando la voluntad de cambio que, desde 1969, sacude los espíritus : se intenta realizar el franciscanismo en autenticidad de vida fraterna, de inestabilidad, de desprendimiento, de compartición con los pobres. Santiago Ramírez, apenas nombrado viceprovincial, multiplica sus cartas pastorales, de tensa fogosidad ascético mística, con que reanimar la llama de amor viva. Y sus asesores inmediatos, Múgica, Rueda, Andueza, Echegaray, aceptan gustosos entrar en complicidad (55). 451

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz