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estabilidad. Manuel de Beizama acude a toda marcha ante el señor arzobispo para darle a entender que no podíamos comprometemos con tres parroquias en la ciudad de Guayaquil; no obstante si el P. Arruazu se prestaba, como solución personal, a doble servicio de capellán y de párroco, no parece oponerse, a condición de que no quede compro– metida la custodia (6). Fracasó a tiempo el proyecto de dicha capellanía y parroquia del "Buen Pastor" y renació la calma chicha. El mismo día 20 de junio de 1957, en que se firmó el convenio, elevaba instancia el señor arzobispo Mosquera a la Santa Sede para que se le autorizase la entrega de la parroquia "Sagrada Familia" a los capuchinos; accedió a su demanda la Sagrada Congregación del Concilio, Roma 5 de octubre. Con fecha 24 de agosto el ministro provincial, Florencia de Artavia, suplicaba en sendos oficios al procurador de la Orden, Estanislado de Munich, que gestionase la fundación de la casa y la aceptación de dicha parroquia; respuesta afirmativa de 30 de octubre, por rescripto de la Sagrada Congregación de Religiosos, n. 5098/57 (7). Entre tanto, Arruazu y Berbinzana van y vienen desde Santa Ana a la Sagrada Familia, sobre caminos polvorientos o fedegando barrizales, a tono con la época estacional, porque de barrio a barrio, en los extremos cenagosos de una diagonal, apenas había calle asfaltada ni empedrada. Berbinzana, director del colegio, parece muy entusiasmado con su puesto; Arruazu, superior y páJ.Toco, "aburridísimo, pues todavía no se ha hecho cargo de la capellanía del Buen Pastor" (8). Celebrada con la fraternidad de Santa Ana la fiesta de San Fermín, acuerdan trasladarse al siguiente día a su nueva residencia, en que no hallan otro ajuar ni mobiliario que dos catres con sus colchones y almohadas, una cocina, mesa de comedor y algunas sillas. "Tuvimos que comprar por nuestra cuenta, con dinero que nos prestaron en Santa Ana, toda la vajilla, ropa de cama, focos eléctricos, etc. etc., por unos 1.000 sucres". Habrá que presupuestar unos 1.500 sucres mensuales para alimentación en plan pacomio, y otros 500 para autobuses, por estar el colegio ubicado lejos del centro urbano. La SBS paga 500 sucres al director y otros 500 al capellán. ¿Qué puede remediarse con esto? "El colegio funciona, aunque con solos 130 alumnos, porque se abrió la matrícula dos meses más tarde que en los demás centros. La parroquia no ha comenzado a funcionar, por estar la capilla en construcción. Mañana salgo a predicar a Manabí, por ver si saco algo de plata para devolver lo que debo". 437

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