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recinto para mejor atenderlo y para dedicarnos a la oración. Nos ha faltado tiempo libre y libertad de ánimo para perfeccionarla. Las preocupaciones pastorales pueden matar el espíritu de santa oración. Creemos que esto no ha ocurrido con nosotros; pero algún hermano se ha quejado del exceso de apostolado". Un sacerdote más, que se incorporase a la fraternidad, "podría ayudarnos a vivir mejor la plenitud de unión con Dios". Por febrero del 73, ambas comunidades de Playas, la capuchina y la de misioneras AMF, celebran una semana de reflexión a la que sigue otra conjunta de ejercicios espirituales, que dirige el viceprovincial Santiago Ramírez. "Preferimos pláticas más en plan de conversión y de oración" -concluye el hermano Matías-. Al cabo de dos meses largos, consiguen superar el obstáculo de los aguaceros y de los barrizales y reemprender su catequesis en El Mon-o y Puerto El Morro. Merced al celo religioso de las jóvenes catequistas, ningún domingo había fallado la celebración de la palabra, en cuyo conocimiento se van adiestrando con la asistencia a cursillos (49). J. A. Recalde vive entre sus feligreses de Engabao del 28 al 31 de marzo absorto en oración, cuando no le distrae su deber pastoral. Durante el mes de mayo, y ya anochecido, proyecciones comenta– das sobre la Historia de la Salvación, en los diversos barrios de Playas. Intervienen un religioso de la fraternidad, tres misioneras AMF y las catequistas del grupo con-espondiente. El 16 de dicho mes, retiro con Santiago Ramírez. "No tuvo la intimidad y el calor requeridos; pero nos hemos ratificado en nuestra resolución de dar la suprema importancia a la oración". Resolución que no es incompatible con una mayor inmersión en el pueblo, "en contacto personal con los fieles, si se quiere evangelizar a fondo" (50). Predican, visitan, alternan con la gente sencilla, reparten hojas volantes, novedosas algunas, como aquélla en que proponen cambiar el giro de las fiestas patronales, convirtiéndolas en efeméride más religiosa y social, a tono con las virtudes del santo que se venera. Las de la Merced estuvieron particularmente animadas con haber dedicado cada día de la novena a un sector social: día del niño, de la madre, de los esposos, de la juventud, de la familia ... Encarece el cronista Matías la colaboración de las misioneras AMF que han per11;itido dedicar un año entero a los feligreses de primera comunión. Hernaiz y Recalde suelen dirigir liturgias penitenciales y horas de reflexión en los cinco días precedentes a la gran solenmidad: 364
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