BCCCAP000000000000000000000198

292 »Señor Obispo: efe"ctivamenle, sí, fuimos a ver la niñita enfer– mita, y es cierto lo que contó la Madre a Su Señoría Ilustrísima. Fuimos Ana Ofelia y yo, encontrando a la negra y fea «piache» piachando a la niñita; es verdad lo que dijo la Madre a Su Señoría Ilustrísima; yo le di un buen regaño a la «piache», a la madre de la niñita, al padre y a todos los que estaban allí reunidos; y una vieja se puso brava; pero a la vieja «piache» y a todas les di un buen sermón primero y después les di un pedacito de bollo y panela que Nlíias !luajiras trabajando en sus labores. - 0,·folinato <le Nazaret nos dió la Madre para contentarlas, y se pusieron alegres oyéndo– nos, menos la negra fea «piache», la cual se fué muy triste. Sí, señor Obispo, la niñita ya se curó del todo, ya está buenecita, sin dar sus padres a nosotros vacas de color sardo ni pañuelo de otras pintas, etcétera, etc. »Todas mis compañeras se unen a mí para saludarlo muy atentamente y haga el favor de bendecir a su hijita, la última de todas, que se encomienda mucho en sus oraciones.-Joaquina María Orfiz, Esclava de María e Hija de la Perseverancia.» · Algunas de estas jóvenes, que han sido educadas en el Orfe– linato, hoy son en sus casitas o ranchos fervorosas catequistas,

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz