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18 P. GULINA ridades civiles. Los Misioneros pudieron intensificar la propaganda y extender notablemente su radio de acción. Los resultados, con todo, fueron casi nulos. Sus esfuerzos se diluían en el inmenso territorio pagano y hostil. Convencido Mons. Otto de la imposibilidad de una labor eficaz en tales circunstancias, y en territorio tan extenso, propuso a la Sda. Congregación de Propaganda Fide la desmembración del Vicariato. En 1905 el Vicariato del Kansu era dividido en dos nuevos territorios eclesiásticos: el Vicariato Apostólico del Kansu Septentrional, con capital en Lanchow; y la Pre– fectura Apostólica del Kansu Meridional, con la capital o centro en Tsinchow. Mons. Otto continuaba al frente del Kansu Septentrional, y para la Prefectura del Kansu Me– ridional fué nombrado el Ilmo. Padre Everardo Ter-laak. El P. Ter-laak inauguró una nueva época de activi– dad: se erigieron estaciones secundarias entre los cam– pesinos, mejor dispuestos a la fe que los habitantes de las ciudades; se organizaron algunas escuelas y se fundó en Tsinchow un Seminario Menor. La obra del P. Ter-laak y la de su continuador Mons. Constantino Dacius, aunque pobre en frutos inmediatos, fué de importancia decisiva para el desarrollo de la Mi– sión. Sobre la base que ellos fijaron, se ha venido edifi– cando hasta hoy.