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130 ANUARIO MISIO SAI,. •La Biblh1 y la tradición china son igualm(::nte falsas: sólo el darvinismo es verdadero. E.n un manual de civismo muy divulgado hay un capitulo que se titula: eYo no creo en los espíritus.> La explicación del maestro se reduce a persuadir a los alumnos que no hay ni buenos ni malos espíritus... que la creencia eu ellos es una rémora para el progreso, que hay que fundar una sociedad con este lema: •No creo ni en los buenos ni en los malos espíritus; en el mundo no hay otro poder que la ciencia ... En otro manual enciclopédico para los niños se lee: •La reli· gión es le ciencia del pasado, le ciencia la religión del presente.• En él se hallan mezclados en el capítulo de grandes hombres de la humanidad en el orden siguiente Jos retratos de Laotse, Confucio, Jesús, Mahoma, y Lutero. Pero aun son más de temer las diversas sociedades fundadas para el progreso de la educación china, enemigas del misionero a quien se proponen desprestigiar preferentemente. La propaganda misionera de los extranjeros, dicen ellos, degrada el espiritu de los KANSU (Chlna).-SHnlu lnlancia de In EsteciOn de YUtuchcn convertidos, descuida la cultura china y sus alumnos no sirven des· pués más que p&ra dependie!ltes, barrenderos etc. etc. Influenciadas principalment.; por la propaganda rusa, especialmente en su odio a Ja religión católica, tienen muchas ramificaciones en provincias,

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